En esta ocasión hablaremos sobre la importancia que tiene la medicina de precisión en el campo de la oncología pediátrica.
A raíz de los avances médicos con miras a ofrecer un mejor cuidado para los pacientes, la medicina de precisión ha surgido para lograr una personalización del diagnóstico y tratamiento que permita combatir la clave molecular del tumor.
En lo referente al cáncer infantil, este tipo de medicina resultará indispensable, ya que aspira a disminuir la utilización de tratamientos innecesarios, así como reducir los errores de prescripción derivados de medicaciones que no solo no son útiles para el paciente, sino que además pueden ser perjudiciales.
Después de conocer, aunque sea de manera superficial, lo que es la medicina de precisión, las diferencias con la medicina tradicional se vuelven evidentes, ya que en esta última se administra el mismo tratamiento a todos los pacientes, sin importar que la enfermedad se manifiesta en cada uno de manera diferente. Algunos pueden verse beneficiados con el tratamiento, pero en otros puede no producir resultados, o incluso causar efectos adversos.
Con la medicina de precisión se evita esta problemática, ya que se brinda el tratamiento correcto, en el momento correcto, al paciente correcto, al emplearse información precisa sobre genes, proteínas y otras características de la patología del paciente para determinar el diagnóstico o tratamiento de la enfermedad.
Algunos países, como Australia, ya desarrollan sus propios programas de medicina de precisión para el tratamiento del cáncer infantil. “Zero” es un proyecto que persigue el objetivo de beneficiar a niños que padecen cánceres mal diagnosticados, mediante la identificación de nuevos tratamientos dirigidos de manera específica a cada caso.
Este programa demora en promedio nueve semanas en obtener un análisis completo del paciente, para luego brindarle un abordaje terapéutico más especializado y preciso. Su nivel de exactitud lo coloca como uno de los programas más sofisticados de medicina pediátrica personalizada.
Como dato, cada año alrededor de 400,000 niños y adolescentes de 0 a 19 años son diagnosticados con algún tipo de cáncer, lo que hace del padecimiento una de las principales causas de mortalidad en este nivel de población. El cáncer infantil se caracteriza por su origen embrionario y se desarrolla en las primeras dos décadas de vida.
Por todo ello, no cabe duda de que la medicina de precisión es un gigantesco paso de la ciencia con miras a resolver uno de los principales males que aquejan a la humanidad.