Un equipo de investigadores del University College London (UCL), el Wellcome Sanger Institute y la Universidad de Cambridge ha logrado identificar la célula responsable de iniciar el desarrollo del carcinoma escamocelular de pulmón (LUSC, por sus siglas en inglés), el segundo subtipo más común de cáncer pulmonar, especialmente frecuente entre personas fumadoras.
Los resultados, publicados en la prestigiosa revista Science, abren nuevas perspectivas en la detección temprana, la prevención y el diseño de terapias más específicas para esta enfermedad, que sigue siendo una de las principales causas de muerte por cáncer en todo el mundo.
¿Qué es el carcinoma escamocelular de pulmón?
El LUSC es una forma de cáncer de pulmón de células no pequeñas, que se desarrolla cuando las células del revestimiento de las vías respiratorias sufren daños continuos debido a la exposición a sustancias tóxicas, principalmente las contenidas en el humo del cigarro.
Con el paso del tiempo, este daño provoca alteraciones celulares que dan lugar a lesiones precancerosas y eventualmente a tumores malignos. Su progresión suele ser silenciosa, dificultando el diagnóstico en etapas tempranas.
La investigación identificó que el carcinoma escamocelular de pulmón se origina a partir de un grupo específico de células basales localizadas en la tráquea, las cuales expresan un gen denominado Krt5. Estas células, tras ser afectadas por carcinógenos como el tabaco, comienzan a multiplicarse de forma anómala y a invadir el tejido pulmonar, desplazando a las células normales.
“Un subconjunto de células que expresan el gen Krt5 se vuelve dominante y desplaza a las células sanas. Con el tiempo, sus descendientes llegan a poblar lóbulos enteros del pulmón y forman tumores”, explicó el doctor Sam Janes, autor principal del estudio.
El experimento que rastreó la expansión celular
Para demostrar el origen celular del LUSC, los científicos marcaron genéticamente las células basales en la tráquea de ratones. Luego, dividieron a los animales en dos grupos: uno fue expuesto a carcinógenos y otro se mantuvo como grupo de control.
Los resultados fueron concluyentes: en los ratones expuestos, las células Krt5+ se expandieron desde la tráquea hasta los pulmones, mientras que en el grupo no expuesto, estas células permanecieron estables en su ubicación original.
Implicaciones clínicas, la ruta hacia una medicina más preventiva
Este hallazgo representa un avance significativo en el entendimiento de cómo se origina el cáncer de pulmón, lo que podría facilitar su detección temprana y permitir el desarrollo de terapias dirigidas a las células basales antes de que evolucionen a tumores.
Asimismo, el estudio refuerza la importancia de prevenir la exposición a sustancias cancerígenas, como el humo del tabaco, y de vigilar con mayor precisión a las personas con factores de riesgo.
Cáncer de pulmón en México: tipos, riesgos y síntomas
En México, los dos tipos de cáncer de pulmón más frecuentes son:
- Cáncer de pulmón de células pequeñas: se presenta casi exclusivamente en fumadores y representa un porcentaje menor de casos.
- Cáncer de pulmón de células no pequeñas: es el tipo más común e incluye el carcinoma epidermoide (escamocelular), el adenocarcinoma y el carcinoma de células grandes.
Además del tabaquismo, existen otros factores que incrementan la probabilidad de desarrollar cáncer pulmonar:
- Antecedentes familiares de cáncer de pulmón.
- Exposición a sustancias como amianto, arsénico, cromo, níquel, cadmio, hollín y alquitrán.
- Contaminación atmosférica.
- Exposición al humo de segunda mano, que contiene los mismos agentes cancerígenos que afectan al fumador activo.
- Personas de 65 años o más, siendo los 70 años la edad promedio de diagnóstico.
- Hombres, quienes presentan una incidencia mayor de esta enfermedad.
- Individuos que presentan enfermedades respiratorias crónicas o trabajan en ambientes con exposición a agentes tóxicos.
En nuestro país, el cáncer de pulmón ocupa el séptimo lugar en incidencia, pero es la primera causa de muerte por neoplasias malignas, debido a su alta letalidad. Cada año, mueren alrededor de 8 mil personas por esta enfermedad, según datos de la Clínica de Tumores Torácicos del Instituto Nacional de Cancerología, citados por la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic).
Los avances científicos representan un hito en la comprensión del cáncer de pulmón asociado al tabaquismo, reforzando la urgencia de fortalecer las estrategias de prevención, diagnóstico temprano y educación en salud pública. Con un enfoque más preciso en las células de origen y los factores de riesgo, México y el mundo cuentan ahora con una nueva base para enfrentar una de las enfermedades más letales del siglo, cuya carga puede reducirse significativamente con investigación, concientización y políticas integrales contra el tabaquismo.